
Consideró que es una realidad “muy penosa y vergonzosa”, el que una menor presa por asesinato, después de conocer una sentencia, exprese en tono de burla que eso no significa nada, “porque en corto tiempo ya estará en la calle”.
El prelado precisó que algunos sacerdotes han estado opinando que no están de acuerdo con que se modifique el Código del Menor, y que el entiende que ellos defienden una parte que el también comparte, pero que el problema hay que comenzarlo a resolver con el “saneamiento” de la familia.
Sin embargo, López Rodríguez explicó que mientras tanto a los menores de edad que están cometiendo esos crímenes hay que controlarlos.
“Mientras tanto a aquellos que están matando hay que controlarlos, porque en lo que saneamos la familia obviamente vamos a tardar un rato y va a morir mucha gente”, sostuvo el prelado.
López Rodríguez habló durante una misa con motivo al Día de Las Mercedes, celebrada en la Catedral, donde estuvieron presentes unos 70 internos de diferentes cárceles del país.