Johnny Alberto SalazarNAGUA.-El legendario seguidor del fenecido merenguero Tatico Henríquez, José Ramón Herrera (El Viejo Loro), murió a la edad de 90 años y según resoluto el Ayuntamiento Municipal, se convirtió en el “Varón del Cementerio”.
Loro, falleció anoche de muerte natural y era el celador de la Plaza Táctico Henríquez desde que fue inaugurada en enero de este año.
Era un hombre pobre en términos económicos, pero era un millonario en conocimiento, alegría y reparto de consejo que incluyo a funcionarios como el gobernador Arístides Victoria o el Fiscal Raúl Quiroz, con quienes compartir desde que eran muchachos.
Con un radio acuesta tenia como rutina visitar diariamente el monumento erigido al Merenguero, ubicado en el centro de la Plaza que lleva su nombre.
A este lugar fue llevado su cadáver desde el lugar en donde fue velado, la Funeraria Municipal, ubicada en la calle Mercedes Bello casi esquina Luperon.
Durante el tiempo que el cadáver fue expuesto en la Plaza en la que servia de orientador y difundía la música de Tatico, conjunto al que alguna vez sirvió de guirero o de tamborero, se presentaron casi el conjunto de las autoridades de la provincia.
El fiscal Raúl Quiroz, sirvió de moderador seguido por el sindico Inocencio Mercedes el senado Jesús Vásquez y el gobernador Arístides Victoria.
Todos destacaron el sentido humano del Viejo Loro de quien dijeron que será recordado cada día por la eternidad de las presentes y futuras generaciones.
LOS REGIDORES BRILLARON POR SU AUSENCIA
A pesar de ser un acto de tipo especial porque este “pobre hombre”, logro juntar a los distintos estamentos de la sociedad comenzando por los poderes públicos, la mayoría de los regidores, sin embargo no pudieron darle ni siquiera un minuto de “su ocupado tiempo”.
El único regidor que se vio en esta actividad de homenaje y ultimo adiós fue a Ezequiel Castillo, los demás Cesarin Tabar, Alfredo Peralta, Ramón de los Santos (El Mello) y el doctor Carlos Suárez, igual que en otras ocasiones brillan por su ausencia cuando se trata de actividades con sentimiento humano.
Es que el Viejo Loro no era un millonario.
Era un simple integrante y seguidor de un conjunto Típico desaparecido con la muerte de Tatico Henríquez.
Fue un “simple” entrenador deportivo durante muchos años, dedicado a ayudar a los jóvenes para que se incorporaran en actividades sanas como el béisbol.
De hecho era un fiel fanático del conjunto Los Tigres del Liceo.
En fin era un hombre que repartió cuotas millonarias de alegría en la música, el deporte, la cortesía y la orientación a miles de personas durante sus 90 años de vida.
EN EL CEMENTERIO
Una multitud abarroto el nuevo cementerio que no quiso perderse una actividad que era seguida por varios equipos de música que tocaban los mejores discos de Tatico Henríquez.
Es que Loro, pedía que al morir lo condujeran al cementerio a ritmo de la música de quien fue su amigo eterno, Tatico.
La misa de cuerpo presente fue encabezada por el diacono Julio Simón Lavandier.
El religioso destaco el hecho de que este hombre sin tener fortuna logro juntar a todos los estamentos del estado, aun fueran de distintos partidos políticos.
Lavandier dijo que los nagueros debemos sentirnos alegres por haber tenido un hombre como Loro, durante tantos años a un hombre que vino desde Nivaje de Santiago y jamás quiso irse de Nagua.
Sus únicos descendientes estuvieron en el campo santo llorando a quien fuera su progenitor.
José Miguel, José Antonio y el más pequeño José Ramón Herrera, (el mismo nombre que su padre), recibieron la solidaridad de la multitud.
LLEGADA DE RAFAEL Y EVA
En momento de la homilía llegaron dos figuras que llamaron la atención.
Se trataba del legendario escritor y dirigente comunista Rafael Charjub Mejia y de quien fuera la esposa de Tatico Henríquez, Eva Charjub.
Contrario a los regidores de Nagua, a estos les dio tiempo para salir de Santo Domingo, la capital dominicana, para unirse al dolor del pueblo.
Rafael Charjub, dijo que jamás podrá olvidar los documentales hechos en los que aparece el Viejo Loro, bajo su autoría y del periodista Huchi Lora.
Manifestó que Nagua ha perdido una gran persona.
Se fue más lejos y dijo que el hecho de que durante su vida se dedicara a cultivar y proyectar la música típica como el Merengue, lo convertía en un hombre de acciones patriótica.
Enfatizo “el merengue es Patria”.
Este lunes 17 de agosto quedara marchado para toda la historia del pueblo de Nagua porque además de despedir a un hombre alegre, se nombra como el “Varón del Cementerio nuevo”, el que esta pautado para ser inaugurado durante el mes de septiembre.
LO ENTERRARON MAL
Que registre la historia de Nagua no hay detalles sobre quien fuera el “Varón” de los cementerios que hemos tenido y mucho menos que se le rindieran las distinciones que al viejo loro.
Los sepultureros al llevar el ataúd al nicho correspondiente, primero introdujeron los pies, alegando que esa forma seria la correcta porque debía estar de frente a donde “sale el sol”.
Comenzaron a pegar mezcla para cerrar la sepultura con los blocks correspondientes.
Casi al terminar, una mujer grito: “lo están enterrando mal” y así no puede ser.
A los hijos y a quienes quedamos allí, el caso nos llamo la atención porque se trataba del “Varón del Cementerio”.
Concluyeron en sacar el ataúd y primero introducir la cabeza, quedando los pies hacia la parte de afuera, porque según las tradiciones locales, esa es la forma correcta.
Que en paz descanse el Viejo Loro.
LOS NUEVE DIAS
El diacono Julio Simón Lavandier, anuncio que los nueves días comenzarían a ser desarrollados en el Santuario Nuestra Señora de la Altagracia a partir de las 6:30 de la mañana y que los últimos rezos serian a las tres de la tarde.
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